Jugar cartas de bajo valor y obligar al oponente a jugar cartas, idealmente de mayor valor.
Cuando un jugador sangra a su oponente, su objetivo es intercambiar (tradear) sus cartas de menor valor por las de su oponente de mayor valor. Además, un jugador también puede intentar forzar una Ronda 3 que sea de la longitud óptima para su baraja mientras le niega a su oponente lo mismo. Por ejemplo, un jugador podría Baitear/engañar a su oponente para que juegue su condición de victoria, como un finisher fuerte o un líder, o jugar una Ronda 2 larga para reducir la duración de la última ronda contra ciertas barajas. Si un jugador ganó la Ronda 1, puede optar por desangrar a su oponente en la Ronda 2 en lugar de hacer un Dry passing. También podrían comprometerse completamente con la ronda e intentar poner dos cero al oponente. Mientras sangra en la Ronda 2, es importante mantenerse al día con los puntos del oponente para no perder la ventaja de las cartas. Sin embargo, a veces puede ser la elección correcta sangrar al oponente y perder la ventaja de la carta en el proceso para tener una mejor oportunidad de ganar la tercera ronda.
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